¿Cómo mejorar en un idioma?

He comenzado una posición nueva que requiere que hablar en inglés a menudo. Aunque mi nivel de inglés es suficiente para hacer mi trabajo, he decidido hacer centrarme en mejorarlo durante los primeros meses.

Lógicamente hay muchas alternativas para mejorar en inglés, desde apuntarte a un curso hasta bajarte una APP, pero como en el pasado nunca he tenido la sensación de optimizar el tiempo de aprendizaje en ninguna de las opciones, he decidido crear un método propio.

La primera pregunta que tenía era, ¿en qué quiero mejorar?, y la respuesta era básicamente «de todo un poco»: pronunciación, gramática, vocabulario, etc. Pero sobre todo, quería asegurar que tenía la suficiente fluidez hablando en inglés para poder expresar con comodidad mis ideas.

De modo que decidí plantear un ejercicio acorde con esta necesidad.

Ejercicio

Antes de nada, necesitas:

  1. Reserva en el calendario un espacio de unos 30′- 45′ al día.
  2. Compra una revista en el idioma que quieras practicar. Recomiendo que sea una revista y abajo explico por qué. Pero si no quieres usar la revista, también puedes usar un blog, canal de youtube, podcast o un libro.
  3. Un boli.

Este ejercicio consiste en tres pasos. Cada día repito lo mismo durante treinta minutos. (Dedica 10 minutos a cada paso)

  1. Leer un artículo en voz alta, redondeando las palabras que no entiendes o no sabes cómo pronunciar, pero no te pares a buscarlas. Sigue adelante aunque te cueste seguir la historia. Ponle énfasis en la pronunciación.
  2. Repasarlo en voz baja, entendiendo bien el argumento: Ahora sí, buscando el significado/pronunciación de las palabras redondeadas. Subraya aquellas expresiones que te gustaría usar más y marca en el lateral aquellos párrafos más importantes de la historia.
  3. Ordenar las ideas y preparar un discurso y exponerlo. Puedes añadir algunas de las expresiones subrayadas y guiarte por aquellos párrafos que hayas marcado en el lateral. Si tienes cerca alguna víctima al que exponerle el discurso aún mejor.


Opcional: Si tienes diez minutos más, puedes comenzar el ejercicio recordando el discurso que hiciste el día anterior. 

¿Por qué una revista? Por un lado porque, como ves, se necesitan artículos relativamente cortos para poder hacer el ejercicio en media hora, la revista normalmente cumple bastante bien este tiempo. Por otro lado, es especialmente útil poder redondear, subrrayar y marcar sobre la revista, cosa que no puedes hacer con los medios digitales (y personalmente no me gusta hacerlo en libros). 

Aunque, si la comprensión oral es algo quieres mejorar, lógicamente sí parece recomendable usar podcast o videos de youtube en lugar de revistas. Yo personalmente practico la comprensión oral cuando escucho peliculas series y podcast en inglés en mis ratos libres.

Por qué hacerlo y qué me ha sucedido a mí


Principalmente porque incluye todo (o casi todo) lo que necesitas practicar para aprender un idioma en un solo ejercicio: 

¿Por qué leer en voz alta?
Al leer en voz alta, mejoras la pronunciación y amplias tu vocabulario. Pero además, varios estudios han demostrado que leer en voz alta aumenta las probabilidades de memorizar lo que lees.

¿Por qué repasar en voz baja?
En este paso estás aprendiendo expresiones nuevas, estás mejorando tu gramática y comprensión lectora. Pero para mi un punto clave de esta parte, es que al fijarte en las expresiones y cómo usan las palabras estás «copiando lo que hacen los nativos», y esto es importante. A veces nos complicamos intentando traducir exactamente cómo diríamos una frase en un idioma, cuando la gracia es entender cómo expresan los nativos las mismas ideas usando sus propias expresiones.

¿Por qué hacer un discurso?
Con la expresión oral y la integración de todo lo aprendido en tus discursos propios. Además, obligarte a preparar un discurso te hace forzar tu mente a pensar cómo ordenar las ideas para que tengan sentido. A menudo, cuando estamos aprendiendo un idioma, tenemos suficientes palabras para expresarnos, solo que no tenemos suficiente práctica en usarlas de la forma correcta para decir lo que queremos. Esto sucede cuando entiendes bien lo que otra persona está diciendo, pero tu no eres capaz de expresarte igual de bien que ésta. Tienes los mismos recursos de vocabulario y gramática que la otra persona, sin embargo él tiene más práctica usando estos recursos para expresar lo que quiere. 

¿Por qué exponerlo a alguien? 
Si lo pruebas, verás fácilmente que la presión de tener a un algo de audiencia (aunque solo sea un oyente) te motiva y te ayuda a tomarte más en serio el ejercicio. Además es una buena forma de evaluarte.

¿Por qué no comprarme un libro de ejercicios?
Si lo que buscas es, como yo, un ejercicio un poco holístico, que optimice tu tiempo y te ayude a ganar fluidez general en el idioma, desde mi punto de vista, no merece la pena dedicarle tiempo a ejercicios separados de gramática, vocabulario, etc. Por mi experiencia, los libros y APPs no suelen ayudarte a unir todos los conceptos que aprendes, más bien te ayudan a mejorar en un único parametro.

Además, es más divertido hacerlo de este modo que no dedicandole treinta minutos al día a un ejercicio de gramática.

Aunque lógicamente son muy aconsejables si tienes un nivel especialmente bajo del idioma o si has identificado claramente una faceta en la que debes mejorar.

Más beneficios que no tienen nada que ver con el idioma
Por último, aunque sean beneficios colaterales, también es importante mencionar que con este ejercicio:

  • Cada día aprendes algo nuevo. Puedes elegir revistas de política, ciencia, historia, etc. 
  • Además obligarte a crear discursos te ayuda a memorizar lo aprendido. Aquí dejo un libro interesante que explica por qué.
  • Te permite practicar la presentación oral (da igual el idioma que sea, las habilidades de presentación son internacionales).  
  • Es divertido y lo disfrutarás mucho más que ponerte a hacer ejercicios de gramática.
  • Ejercitas la memoria, especialmente si hacer el «extra» de recordar el discurso del día anterior.

Como siempre, ¡ahora es tu turno!