Seis tips prácticos del libro Hyperfocus

Descripción general del ejercicio

Como ya sabes, el objetivo de esta newsletter es dar ejercicios prácticos que te permitan ser efectivo en tus esfuerzos. Los resúmenes de libros los quiero enfocar de la misma manera, vamos a extraer los tips del libro Hyperfocus de Chris Bailey y a ver exactamente cómo podemos llevarlos a la práctica.

Chris Bailey nos dice que nuestra concentración es limitada, y que, por eso, es importante saber cuándo necesitamos estar concentrados de verdad, para aplicar los tips que voy a explicar a continuación. No voy a entrar en la teoría (si estáis interesados os recomiendo leer el libro, que lógicamente es mucho más rico). Aquí solo voy a explicar seis ejercicios que he extraído, para centrar nuestra atención en lo que realmente queremos.

Crea un lugar de trabajo sin distracciones

  • Elimina todas las notificaciones activas del móvil. Notificaciones sin ruidos ni vibraciones.
  • Apunta todos los pensamientos que te distraigan en una libreta, papel, etc. Escribirlos permite que el pensamiento no se quede dando vueltas en la cabeza.

Haz descansos reales

  • Descansa “de verdad” en tus ratos libres. Deja 5 minutos entre tareas para desconectar de todo. Es decir, ni siquiera mires el móvil. Al mirar el móvil no descansas la atención, la enfocas en otra cosa, de modo que cuando tienes que concentrarte en la próxima reunión o tarea no has podido descansar.
  • Cuando estés enfocado en algo y veas que comienzas a perder la atención, deja unos minutos la tarea para hacer un descanso y volver más fresco. De nuevo, no mires el móvil en este descanso.
  • Duerme al menos 7 horas.

Extra

  • Tomar café nos ayuda a llevar a cabo actividades de concentración en una sola tarea. Sin embargo nos dice que no es adecuado para tareas de creatividad o de multitasking.

Cómo lo hago

Personalmente prefiero aplicar solo un par o tres de tips a la semana. De lo contrario, si intento aplicarlo todo, estoy más pendiente de acordarme de qué debo hacer que de concentrarme en hacerlo bien.

Al dividirlo en los tres apartados diferentes como has visto arriba (distracciones, descanso y el de extra) puedes comenzar eligiendo solo uno de ellos, ya que cada uno contiene menos de cuatro ejercicios.

Cuando los apliques, es más importante que te evalúes correctamente para ver qué ejercicios te han funcionado mejor que no que los hagas todos sin evaluar nada. Ya que, en el segundo caso, no estás haciendo un esfuerzo efectivo. Por eso, para llevar una buena evaluación de estos ejercicios, mi consejo es que uses el diario de aprendizajes. Este te permitirá que, antes de comenzar el día, decidas en qué momentos vas a aplicar los ejercicios y, al final del día, hagas una reflexión sobre qué ha sucedido y cómo sientes que han funcionado.

Por qué hacerlo y cómo me ha ayudado a mí

En la prueba que he hecho estas semanas no los he testeado todos.

Algunos de los ejercicios ya los hacía antes, como, por ejemplo, tener el móvil sin notificaciones, dormir más de 7 horas o tomar café. De modo que en estos no puedo comparar el resultado de hacerlo vs. no hacerlo.

Lo que sí he decidido testear es el tip de dejar cinco minutos de descanso sin hacer nada entre tareas (o reuniones) y parar un par de minutos cuando no consigo concentrarme en la tarea que tengo delante. Como ya hemos comentado, los descansos sin móvil, ordenador, etc. Personalmente, me levanto de la silla, doy una vuelta por casa y vuelvo a sentarme.

Lo cierto es que este ejercicio ha permitido darme cuenta de lo rápido que de agota el cerebro cuando no le das ningún descanso. Antes, acababa el día agotado, pero no me daba cuenta porque lo tenía normalizado. En cambio, dándome solo 5 minutos de descanso, sin móviles ni distracciones, me he mantenido más fresco durante todo el día.

Es muy habitual pensar que estás descansando mientras miras el móvil o haces otras cosas, pero claramente no (y con este ejercicio lo puedes comprobar en un solo día). Sin embargo, también es verdad que tenemos tan automatizado el sacar el móvil del bolsillo o ponernos a contestar un correo en cualquier rato muerto, que debo hacer un esfuerzo para evitarlo.

¡Ahora te toca a ti ponerlo en práctica!

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